Aunque muchos, suelen usar los términos de apraxia y disartria como sinónimos, lo cierto es que ambas enfermedades o patologías son muy diferentes. Es por ello que a continuación te presentamos qué diferencia hay entre apraxia y disartria, las cuales son alteraciones del habla, para que puedas conocerlas un poco mejor y saber en qué consisten.
Básicamente, se podría definir la apraxia como un trastorno neurológico que se caracteriza por no poder realizar movimientos a pesar de tener la capacidad física y el deseo de realizarlos. Es decir, la persona, quiere realizar un movimiento pero su cerebro no da la orden de que se hagan esos movimientos.
Dentro de la apraxia, podemos encontrar cuatro tipos diferentes, como son:
- Ideatoria: que es una pérdida en la capacidad de formular mentalmente y expresar verbalmente la secuencia del proceso de la acción.
- Construccional: que significa que no se puede escribir ni realizar dibujos sencillos.
- Ideomotora: que viene a ser aquella en la que el individuo no puede expresar las expresiones que corresponden a una acción
- Bucolingual, bucofacial y/o bucolinguofacial: la cual suele incapacitar el movimiento de la lengua, labios, etc.
Por otra parte, la disartria, a lo que hace referencia es una alteración en la articulación de las palabras, atribuida, fundamentalmente, al sistema nervioso.
Como en la apraxia, son varios los tipos de disartria que podemos encontrar:
- Bulbar: que afecta a los núcleos del aparato oro-linguo-faríngeo.
- Pseudobulbar: que se localiza en las vías corticobulbares.
- Cerebelosa: que afecta, como su nombre indica, al cerebelo, y produce un habla escandida.
- Parkinsoniana: que se da en el contexto de la Enfermedad de Parkison.
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